¡Me encantan los rincones!, ¡Bieeeen, hoy nos toca rincones!, ¡Cómo me divierten los rincones!.., son expresiones que con frecuencia escucho a mis alumnos de Educación Infantil, y me llenan de satisfacción.
A muchas familias les surgen interrogantes sobre este interesante tema: ¿Qué son los rincones? ¿Son una moda? ¿Ofrece ventajas?
He aquí una breve reflexión, desde mi experiencia como educadora, en el interesante trabajo por rincones.
Los rincones de trabajo son una forma estimulante, flexible y dinámica de organizar el trabajo personalizado. Responden a una concepción de la educación en la que el niño/a es el referente principal.
En unos espacios delimitados de la clase, los niños y las niñas, de manera individual o en pequeños grupos, llevan a cabo simultáneamente diferentes actividades de aprendizaje, lo que permite dar una respuesta adecuada a las diferencias, intereses y ritmos de cada cual, algo que considero muy importante y esencial en la educación.
Los rincones tienen una larga tradición en la escuela y, aunque la cuestión no es nueva, sí es actual. Ofrecen infinidad de ventajas, como potenciar la necesidad y los deseos de los niños/as y adquirir nuevos conocimientos, ayudarles a ser conscientes de sus posibilidades, a dar valor a sus progresos, a aceptar los errores, a seguir trabajando y a no rendirse fácilmente ante las dificultades. Favorece las relaciones afectivas, la autonomía, les ayuda a ser más responsables con el material y en el trabajo, y les exige y les crea la necesidad de un orden. Aprenden a organizarse, a planificar su trabajo, a saber qué quieren aprender y qué camino pueden utilizar para conseguirlo.
Los rincones permiten una cierta flexibilidad en el trabajo, abren paso a la creatividad y a la imaginación de los niños/as, y les dejan espacio y tiempo para pensar y reflexionar. Como vemos, ofrecen multitud de ventajas a los/las alumno/as, tanto en su aprendizaje como en su formación en valores.
En nuestro centro trabajamos cinco rincones: rincón de artística, rincón lógico-matemático, rincón de biblioteca, rincón de letras y el rincón de juego simbólico, en los que ofrecemos diferentes actividades donde se potencia todo lo descrito anteriormente y en donde nuestros alumnos/as aprenden disfrutando, divirtiéndose.
¿Hay una cosa más hermosa que ver a nuestros/as alumnos/as felices y con ganas de venir al cole porque hay, entr otras cosas, rincones de trabajo? Desde mi vocación como educadora, la respuesta es muy clara. No hay mayor gratificación que ver a mis alumnos/as aprendiendo felices y disfrutando.
¡QUÉ GRAN REGALO SER EDUCADORA! ¡QUÉ ESTIMULANTE TRABAJAR EN RINCONES!
Aurora Lozano González
Maestra de Educación Infantil